El desprecio de Roland Garros a la Casa Real española

La Infanta Elena fue la representante de la monarquía española en la final de París, pero la organización del torneo no estuvo a la altura. Tal y como revela Joan Solsona en 'Marca', sentaron a Elena en segunda fila del palco, y parte de su séquito se quedó sin ver el partido.

Además, tampoco le franquearon el acceso a la sala de invitados de laFederación Francesa de Tenis.

Tras la suspensión del partido, el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, que ocupó la localidad contigua a la de la Infanta durante el duelo y había llegado junto a ella en un Falcon de las Fuerzas Aéreas, presentó una protesta oficial contra el trato dispensado por parte de la organización de Roland Garros.

Arropando a la hija mayor de Sus Majestades en el choque entre Rafa Nadal y Novak Djokovic también estuvieron José Luis Escañuela, presidente de la Federación Española de Tenis, y José Ramón Bauza, presidente de las Islas Baleares.

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