Cuando le preguntan si cree que el libro de papel se va a acabar, Nicholas Negroponte mira de frente y dice: "Yo no lo creo. ¡Yo lo sé!".
Pero aunque sea uno de los predicadores más famosos de la revolución digital, Negroponte deja cabos sueltos: "Es interesante... Normalmente leo en mi iPad, pero estoy leyendo un libro físico.
Estoy contradiciéndome, pero, por lo menos, soy honesto. Es el primer libro físico que he leído en muchos años y la explicación es tonta: literalmente, me quedé sin batería".
El honesto Negroponte es nada menos que el inventor del programa 'Un computador por niño' y el fundador del célebre Media Lab, del famoso Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), cuna de inventos como algunos estándares de Internet, formatos de archivos multimedia o prótesis robóticas.
Hace 15 años, profetizó con certeza la vida hiperconectada de hoy en su libro Ser digital,pero, aun así, no encuentra el botón de Power Point que le permita hacer una proyección de pantalla completa.
Llegó a Bogotá el miércoles pasado en la noche y al día siguiente asustó a las editoriales con una conferencia en la Feria Internacional del Libro, en la que comenzó diciendo: "Agradezco que me haya invitado el gremio editorial, pese a que vengo a decir que el libro de papel se va a acabar en cinco años".
No obstante, Negroponte matiza su predicción en diálogo con EL TIEMPO: "No quiere decir que no se vayan a imprimir cosas para leer, pero va a ser un lujo. No va a desaparecer para la gente rica. Será como ir a la ópera o al ballet".
Negroponte vive siempre varios años adelante del resto de los mortales. Ahora está empeñado en desarrollar, con 70 o 75 dólares (unos 140.000 pesos), un computador tipo tableta que combine lo mejor del iPad y el Kindle, dos productos archienemigos en el mercado de los libros digitales. Tiene la apariencia del primero y la pantalla ahorradora de energía del segundo.
Y, como no está de más, corre a aclarar: "Esto se anunció mucho antes que el iPad".
Todavía hay quienes le cobran el haber dicho en el 2005, por todo lo alto, que cada aparato de 'Un computador por niño' costaría 100 dólares y no los 200 que terminó costando. Por eso, su foco hoy es mejorar el diseño original.
"Es una tableta hecha totalmente de plástico, a muy bajo costo, irrompible, a la que se le puede dar manivela con la mano para cargarla. Estamos a dos o tres años de lograrlo", explica, mientras muestra en su computador (con la ayuda de alguien más), las imágenes del diseño final del dispositivo gratuito, que llegará a millones de niños pobres.
Ya le salió competencia. India anunció hace dos semanas que ensamblará un portátil por 35 dólares (unos 65.000 pesos), pero Negroponte no está preocupado: "Eso no es posible -asegura-.
Tal vez en dos años, pero se necesitaría reducir el número de pasos de la fabricación de la pantalla, porque eso lo hace muy costoso. Se requieren inventos y descubrimientos".
Con la certeza que le da haber pronosticado que la música iba a dejar de venderse en formato físico -lo cual hoy es más que obvio- dirige su artillería a los maestros: "La educación va a ser menos autoridad y disciplina, y más exploración y juego".
Predice que con un computador por cada niño se acabarán "las filas perfectas de pupitres" y para demostrarlo, presenta escenas de clases en países islámicos en las que la curiosidad por la llegada de sus portátiles de plástico blanco y verde rompe cualquier orden estricto. Mientras tanto, vuelve al presente:
¿Cómo se llama el libro de papel que está leyendo?
Ni siquiera lo recuerdo. Es tan malo que me da vergüenza.
l profeta de los bits y los bytes
A Nicholas Negroponte le hubiera bastado con fundar y presidir la asociación sin ánimo de lucro Un Computador por Niño y el laboratorio de medios del MIT (como, en efecto, lo hizo) para pasar a la posteridad.
Pero, además, fue un pionero en el campo del diseño asistido por computador, miembro del MIT desde 1966, autor del 'best seller'
Ser digital (que se ha traducido a más de 40 idiomas), de la junta directiva de la firma Motorola, conferencista permanente de las principales ferias de tecnología e impulsor de nuevas empresas del mundo digital, por medio de una empresa de capital de riesgo.
En este último campo, ha logrado financiación para más de 40 compañías, incluyendo la célebre revista Wired.
ÉDGAR ALFONSO
REDACCIÓN VIDA DE HOY
F eltiempo.com
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