De adicto a salvador de vidas en el Bronx, la historia de Jhonny

Sueña con humanizar un sector estigmatizado por las drogas y la delincuencia.

Jhonny se levanta todas las mañanas desde hace 15 años a trabajar en elBronx, un lugar donde además de las drogas y el delito confluyen humanos que necesitan un abrigo o algo de comida caliente para deambular por las frías calles de Bogotá.

Él, ahora funcionario de la  sabe cuándo dejó de ser buen estudiante y deportista para convertirse en un adicto. "A los 16 años me enamoré. Ella consumía bazuco, vivía en el Cartucho y manejaban una olla. Yo caí", cuenta Jhonny. Así se enredó en la vida de jíbaro por años.

"Yo vivía en un pagadiario de 200 pesos por noche", añade. Se ganó no solo decenas de enemigos sino cinco tiros en la cabeza que lo dejaron cuadripléjico durante 18 meses. Luego de su recuperación no había otra opción que emigrar a Medellín, en donde también se mezcló con el mundo de la delincuencia hasta sobrepasar los límites lo llevó a rehabilitarse en una comunidad terapéutica. "Hoy llevo 20 años de sobriedad", asegura.

Desde hace 15 años a Jhonny lo conocen en el Bronx. "Aquí viven 4.020 personas, muchas de las cuales no consumen, pero se sienten bien ahí". Su labor es la de sensibilizar a quienes carecen de un hogar, comida y bebida para que se beneficien del lugar de paso. "Para mí es un orgullo brindar apoyo psicológico a gente tan talentosa. Muchos médicos, pilotos, odontólogos que cayeron en la droga".

Pero también pasa tragos amargos en su labor diaria. "Es doloroso ver que siguen llegando niños maltratados. La juventud se volcó al Bronx. Aquí terminan miembros de las siempre consumiendo. Eso ya no es afición".

Jhonny pasa saliva para lidiar con lo que le duele y todos los días parte a las 6:30 a.m. con 14 camiones que trasladan a decenas de habitantes de la calle a hogares de paso. Así se ganó el aprecio de muchos y la desconfianza de otros.

Detrás del cabildo

Jhonny fue el hombre que trabajó para que el pasado cabildo, el primero en realizarse con habitantes de la calle, fuera un éxito.

Él y su equipo se dieron la pela de entrevistar a unos 950 habitantes de la calle para que se animaran a asistir. "Vinieron 400. Estoy feliz".

A eso le seguirá apuntando Jhonny. "A que la sociedad entienda que en el Bronx también se ama, se vive y se necesita...se necesita mucho".

Carol Malaver

F  eltiempo.com