Philipe Croizon nadará alrededor del mundo sin brazos ni piernas

Las ganas encontrar nuevos retos desde que nadó el Canal de la Mancha lo llevaron a este desafío.

El nadador francés Philippe Croizon anunció que planea nadar por todo el mundo, a pesar de no tener brazos ni piernas.

Él y su compañero de natación, Arnaud Chassery, revelaron un plan para enlazar los cinco continentes del mundo, nadando a través de una serie de estrechos que los separan.

Después de haber perdido sus extremidades a raíz de un accidente eléctrico, Croizon dijo que quiere demostrar que sigue estando a la altura del desafío. Pero también quiere enviar un mensaje más universal.

"Vamos a enlazar simbólicamente los cinco continentes, dos personas pequeñas como nosotros, dos hombres pequeños, vamos a ser capaces de construir un puente entre los continentes... Eso significa que vamos a unirlos. O sea, que nadie está muy lejos el uno del otro. Así que incluso, si tenemos diferentes opiniones políticas o colores de piel, incluso con nuestras incapacidades, todos vivimos en el mismo planeta. Y ese es el mensaje claro que queremos transmitir", dijo él.

Croizon ya ha nadado el Canal de la Mancha, una hazaña que lo hizo aún más decidido a asumir el nuevo reto.

"Cuando has tenido una alta dosis de ese tipo de sentimiento, se convierte en una droga, no puedes superarlo. Cuando has terminado con el Canal, dices 'Caray, no voy a volver a la cama, no quiero volver allí, me levanté del sofá. No quiero ser un atleta sofá-dependiente'. Así es como comenzó la nueva aventura", dijo.

Desde su niñez, Croizon había soñado con nadar el Canal de la Mancha. Cuando tenía 26 años sufrió una descarga eléctrica de gran alcance al cambiar una antena de televisión, después de lo cual le tuvieron que amputar las cuatro extremidades.

Pero él estaba decidido a no renunciar a su desafío de atravesar el Canal, y le envió una petición de ayuda a Chassery, que ya había nadado los 32 kilómetros entre Francia y el Reino Unido.

"Cuando llamé a Arnaud, le dije: 'Hola, soy Philippe Croizon, quiero cruzar a nado el Canal'. Y él dijo: '¡Eso es genial!' Y yo le dije, 'Sólo un pequeño detalle, no soy deportista'. 'OK, tendrás que trabajar en ello'. 'No tengo brazos ni piernas'. '¡Ohh! Eso va a ser difícil'. Pero él me dijo de inmediato: 'No te preocupes, estoy en Gran Bretaña en este momento preparándome para cruzar a nado el Estrecho de Gibraltar, ven y únete a mí, si quieres entrenar", bromeó Croizon.

Ambos planean salir de Francia el 6 de mayo para la primera etapa de su viaje, que une Australia y Asia nadando desde Papúa Nueva Guinea hasta Indonesia. Durante el verano cruzarán el Mar Rojo (de Asia a África), el Estrecho de Gibraltar (de África a Europa) y el estrecho de Bering (de Asia a América).

Planean terminar a mediados de agosto, después de un breve viaje a la Casa Blanca, tras haber nadado un total de más de 85 kilometros y de haber pasado 45 horas en el agua.

Aparte de las distancias, hay algunos problemas físicos graves. Las corrientes en el Estrecho de Gibraltar son muy graves y los nadadores tendrán que alcanzar una velocidad de 3km / h para superarlas.

También experimentarán temperaturas extremas con el agua en el Mar Muerto que llega a 26 grados centígrados, mientras que la del Estrecho de Bering está sólo un poco por encima de los cero grados.

Sus muchos logros incluyen el buceo y el paracaidismo, así como sus hazañas a través del Canal. Ahora espera que su último desafío difundirá su mensaje igualitario a una audiencia aún más amplia.

REUTERS

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