Tras cinco años de trabajo entre Miami y Colombia, Miguel Varoni volvió al país.
Aprovechará su estadía para promocionar Más sabe el diablo, la adaptación de ¿Por qué diablos?, que emite actualmente el canal Caracol en las tardes, y para asistir, el próximo 10 de septiembre, al lanzamiento de la película Sin tetas no hay paraíso, en la que interpreta a un cirujano plástico morboso.
Con su estilo francote y desparpajado, el actor, director y empresario de Telemundo habló con EL TIEMPO.
Se dice que usted tiene un alto cargo ejecutivo en Telemundo ¿cuál es exactamente?
Soy director creativo y además, actor y director. ¿Mis funciones? Todas: actúo, dirijo, estoy en reuniones de desarrollo de proyectos... etc.
¿Cómo logra dividir su tiempo entre ese rol de ejecutivo con los de actor y director?
Realmente me lo dividen. Patricio Wills, mi jefe directo, es el encargado de hacerlo.
En el rol de director, ¿cómo se ha sentido con la dupla Varoni-Ramiro Meneses?
Muy bien, muy cómodo, siento que nos complementamos muy bien.
¿Cómo es trabajar como director para el mercado latino?
Contar una historia compleja de una manera clara y estética requiere más creatividad. Pero, en todo caso, Telemundo abre cada vez más el abanico de producciones, con proyectos que van desde novelas totalmente rosa, como El clon; poco convencionales, como Sin senos no hay paraíso, y de suspenso, como ¿Dónde está Elisa? El público que ve telenovelas es cada vez más exigente en Colombia y en el mundo.
Usted dirigió 'Sin senos no hay paraíso', ¿cómo ve la película hecha por Gustavo Bolívar?
Es la película con todo lo que no se pudo mostrar en televisión, ni en la serie de Caracol, ni en la novela de Telemundo.
¿Qué tan maleable es frente a la voz de un director sin experiencia cuando está en el papel de actor?
Nadie conoce los personajes y la historia mejor que su autor y, en este caso, tuvimos la suerte de que Gustavo Bolívar hiciera las dos funciones. Supo aprovechar mi experiencia actoral y me guió para encontrar a Mauricio Contento tal como él lo quería. Me sentí muy cómodo.
¿A qué lado se siente más a gusto, al frente o detrás de cámara?
Son sensaciones y experiencias diferentes, pero se alimentan mutuamente: como actor me alimento para dirigir y viceversa.
¿Vio a Víctor Mallarino en '¿Por qué diablos?' o prefirió no influenciarse?
Desafortunadamente no lo vi, pero no hubiera sido problema, porque esto no es ¿Por qué diablos? Es una adaptación, muy bien hecha, por Jimena Romero.
¿Cómo es su personaje en 'Ojo por ojo'?
Se llama Nando Barragán. Es el hombre que desata la guerra entre las familias Monsalve y Barragán. Este será el centro de la historia.
Muy personal
¿Cree que parte de la clave del éxito como pareja con Siachoque es que ella se amolda a muchas de las cosas que usted quiere?
Creo que es mutuo. En varias ocasiones he sido 'el señor de Siachoque' (risas).
Dicen que Catherine vino a cuidarlo, sobre todo en esta última producción...
Cathy no tiene que cuidarme de nadie.
¿Cómo esquiva una propuesta indecente?
Soy un experto gambeteando.
¿Qué plato lo hace repetir?
Sushi, pasta, la comida árabe. Ese es el problema: me gusta todo.
¿A quién le reza cuando está en apuros?
A Dios.
¿Para vivir, prefiere Colombia o Miami?
Disfruto lo que las dos posibilidades me ofrecen.
LUZ ADRIANA VELASCO C.
CULTURA Y ENTRETENIMIENTO
F eltiempo.com
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